Vía Emprende, fuente La Segunda.-
Evitar que las empresas sean multadas por la autoridad ambiental y que a la vez tengan claridad de los procesos que deben cumplir de acuerdo a la normativa vigente, es la meta que se fijó Gonzalo Asencio (36 años) al crear un software especial que combina tecnologías de la información con la regulación chilena, el cual bautizó como SIGEA (Sistema Integrado de Gestión de Cumplimiento Ambiental).
Asencio estudió ingeniería industrial en la Universidad de Chile y al graduarse derivó al área ambiental, “que en esa época era un tema emergente aún, con ciertas bases, pero relativamente nuevo”. Comenzó haciendo consultorías y luego partió a la Conama, dedicado a la información ambiental. Entre 2001 y 2005 fue el responsable de diseñar e implementar la plataforma electrónica del Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental (SEIA).
Luego de su experiencia en el gobierno, en 2005 se decidió a estudiar un master en la Universidad de Londres en Planificación y Desarrollo Sustentable. Con esa experiencia, en enero de 2008 inició su veta emprendedora: formó la consultora ambiental Gisma, de la cual hoy es gerente general.
A fines del año pasado comenzó a elaborar el software SIGEA, con financiamiento de Innova Chile de Corfo. El primer semestre de este año empezó a comercializarlo y ya lo emplean una empresa de energía, otra de infraestructura, y tiene otras tres compañías en lista de espera. Su meta es terminar 2010 con 10 clientes. “Estamos apostando a que parte de nuestros aliados serán consultores ambientales.
Tener una consultora muy grande no es el negocio al que apunto porque hay un tema de escala, sino que buscaremos ofrecerle este producto a las consultoras. Tenemos un área fuerte de desarrrollo tecnológico, y ahí está nuestro valor”, sostiene el empresario. Inversionistas ángeles cortoplacistas Asencio cuenta que desde que era universitario quería emprender. “Es súper cómodo ser asalariado, pero tienes una dependencia. Había un bichito en mi familia, casi todos son emprendedores”. El software que creó junto a un compañero de universidad permite asegurar el cumplimiento de las normas y permisos ambientales de las empresas que someten sus proyectos al SEIA, y de paso evitar las millonarias multas que establecerá la nueva institucionalidad ambiental.
Asencio explica que hay muchas empresas, incluso de gran tamaño, que aún funcionan de forma muy precaria en el manejo de información ambiental y son sujetos de multas debido a que no recuerdan los plazos que deben cumplir para entregar un informe, por ejemplo. “Al tener todo digitalizado y sistematizado en un sólo programa, el manejo de la información y la toma de decisiones se hace mucho más fácil”, explica.
Como el acceso del software es vía internet, se puede llegar incluso mediante Blackerry o Iphone, “el producto está en evolución y seguimos trabajando. La idea es que los usuarios lo puedan ver desde múltiples plataformas”. A futuro, Asencio quiere expandir su empresa a Argentina, Perú y Colombia. “Tenemos la ventaja de que Chile es muy bien visto en materia de gestión ambiental, lo que nos da una buena plataforma”, explica.
Pero necesitan de un inversionista. En ese sentido, critica la visión de corto plazo que tienen los inversionistas ángeles, “muchas veces quieren recuperar su inversión en el corto plazo, tal como un inversionista común y corriente. Hay que negociar bien, porque a veces el emprendedor puede salir trasquilado”, dice.